Ganador del Goya al mejor cortometraje en 1995, Aquel Ritmillo es uno de esos cortometrajes que siempre flotan en el subconsciente colectivo.
En realidad la historia que cuenta es bastante absurda, como en general todo lo tocado por la mano de los Fesser de toda la vida, pero tiene un encanto especial.
El protagonista es Luis Ciges, haciendo de Luis Ciges, pero con ritmillo. Está muy gracioso en el papel de trabajador de una compañía de electrodomésticos detective que se dirige a la casa de un moroso para cobrar una factura y se convierte en el cazador cazado.
El corto es casi un preludio de El Milagro de P. Tinto, que dirigiría 3 años después, con un maravilloso trabajo del gran Luis Ciges, ese detective con aires de Fred Astaire, que es una de las imágenes que se quedan grabadas en la retina. Junto a la música, claro y algunos otros actores de este corto repitiendo.
Supuso el debut en la dirección de Javier Fesser y se llevó unos cuantos premios internacionales, además del ya citado Goya.
Gran corto para pasar un rato divertido.