PAUSA. Eso es lo que hace Li Wei en sus fotografías, detiene el mundo y lo observa, y se deja ser observado al mismo tiempo. Son sus reflejos, o ese estado de ingravidez donde el pensamiento fluye como consecuencia de aquella abrupta interrupción y la inercia desaparece como un pedo en medio de la brisa. También están sus videos y entonces se ve claramente: en su obra hay acción, y menos o nada de photoshop o maquillaje digital de lo que imaginaste en un comienzo.
Link:
<"http://www.elcultural.es/HTML/20060119/ARTES/ARTES16359.asp" />